26 agosto, 2014

 photo _MG_9952_zpsd56be40f.jpg

 photo _MG_9909_zps51ee98d2.jpg

 photo _MG_9871_zps08bf1332.jpg

19 agosto, 2014

 photo _MG_9612copia_zps60c73554.jpg

El tiempo vuela. Este sueño ya lo he vivido. Una mujer tiene que saber ser mujer. Bailar en la cocina, sexo en el baño. Procrastinar. Y fin del verano.

05 agosto, 2014

Anoche quedamos para ir a cenar con Veronica e invito a una amiga suya, Hilaria, una preciosa italiana bajita muy habladora, con una sonrisa cautivadora que me recibió alagandome por mi nombre, eso me recordó a il postino, Beatrice inspira grandes amores, sin duda cuando vuelva a casa sacaré mi viejo tomo de la divina comedia para seguir conectada con Florencia. Regresando a anoche. llegamos a ese restaurante donde hacen los mejores gnocchi de la ciudad y le cena fue una velada encantadora, botella de tinto y risas, cuando terminamos la cena alargamos la ultima copa, después paseamos por una Florencia vacía, que es sin duda lo mejor de este lugar, sus callejones en penumbra, Florencia da paso a la noche, deja que la oscuridad se cuele, crea un misterio y una paz dormida de estas que te hacen latir el corazón porque estas viviendo un momento increíble, lo que de día eran calles atestadas, ahora son solo para nosotros, dos gatos trasnochados, lo mejor es ir vagando y de pronto te descubres en una plaza con majestuosas esculturas, llenas de poder y drama,  aunque no solo te fascinas con las estatuas y sus sombras como algo verdaderamente vivo. Nos también con una pareja que estaba recorriendo la plaza de la mano a saltitos y yo les conté mi experiencia, les dije que gracias a Jules et Jim, en el Louvre los locos corren por esos pasillos y como Luz y yo hicimos nuestro pequeño homenaje en el Prado.

Me gusta ir de camino a la cama guiada por la mano de Pablo, me gusta concederle el sueño, porque sus despertares son eternos y dulces.  También me gusta que al abrir la puerta la pequeña gata negra que tenemos por compañera de piso, se acerque para decirnos que quiere compañía y que se alegra de que volvamos.

Ayer se pintó el día con los mejores colores, iban sucediendo pequeñas cosas que me alegraban el espíritu, de esas que motivan a tocar las nubes.